martes, 16 de enero de 2007

LOS VOLANTES COLOR BLANCO CON LUNARES VERDES

Soy andaluza pasé mi juventud en Córdoba donde conocí a mi marido ya hace más de cuarenta años que vivo en Zaragoza y aún conservo el acento de mi querida tierra. Recuerdo una anécdota que me sucedió a los pocos días de llegar aquí.

Cogimos un piso y me dispuse a decorarlo a mi gusto, quería adornar las baldas de mi despensa con unos volantes de plástico de color blanco con lunares verdes.

Yo muy andaluza, entré en una droguería cerca de mi nueva casa donde los ví a los volantes que me gustaban en un estante en el escaparate.

Al entrar uno de los dependientes se dirigió hacia mi para atenderme.
-¿Qué desea señora?- Me preguntó
- Un "plactico" blanco con lunares verdes...
Y me dice:- No, no tenemos "platicos" con lunares verdes.
Y le respondo un poco molesta:- Pero ¿Cómo que no tienen? Si desde aquí lo veo en ese estante- señalé.
-¡Ah!-dijo el pobre hombre- ¡Un plástico! Perdone, perdone, no le había entendido...
Cuando lo conté en casa a mi familia nos reímos mucho. No he podido olvidarlo y me ha parecido que es una anécdota muy simpática para compartir con todos vosotros.

Estrella Pulido

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy divertido (a mí me lo contó mi madre)y de verdad que nos reimos mucho. Han pasado muchos años y a pesar de ello nos acordamos(sabíamos que lo pondrías). Un beso mamá y abuela (Juan Luis, Inma, Aroa y Yael)

Anónimo dijo...

Aroa Ramos Mainar.

¡Esa es mi abuelaaa! Esta historia yo no me la sabía, y me ha gustado mucho.
Si es que mi abuela tiene esa historia y muchas otras que contar.

¡TENGO LA MEJOR ABUELA, Y LA MÁS GUAPA!!

Sigue asi de maja abuela, no cambies y cuidate. Besos.